Invertir en ‘private equity’: cómo obtener retornos elevados con un riesgo ajustado
En el actual entorno de bajos tipos de interés y gran volatilidad en los mercados bursátiles, cada vez son más los inversores institucionales en España que buscan alternativas para diversificar y mejorar la rentabilidad de sus carteras. El ‘private equity’, o capital privado, está ganando especial protagonismo como activo alternativo capaz de ofrecer retornos cuantiosos en el medio y largo plazo, con un riesgo asumible y un perfil descorrelacionado respecto a la renta fija y variable tradicionales.
¿Qué es el ‘private equity’ y cómo funciona?
El ‘private equity’ consiste en la inversión en compañías que no cotizan en bolsa, que presentan un potencial de crecimiento a largo plazo. Las firmas de capital privado invierten en estas empresas, generalmente adquiriendo participaciones de control, para impulsar su transformación y crecimiento. Se articulan mediante fondos que suelen exigir compromisos de permanencia prolongados, habitualmente de 7 a 10 años, a cambio de una posible alta rentabilidad.
Estos fondos destacan por su baja liquidez, escasa correlación con los activos tradicionales, barreras de entrada elevadas y gran dispersión en resultados entre gestores, lo que obliga a los inversores a realizar un exhaustivo análisis previo.
Ventajas de invertir en capital privado
- Rentabilidades atractivas: Pueden superar el 10% anual, con medias estimadas en torno al 14% neto en segmentos menos competitivos, como el mercado medio y bajo (lower & mid market).
- Diversificación: Su descorrelación permite complementar carteras expuestas a la volatilidad bursátil o la baja rentabilidad de la deuda pública.
- Potencial transformación empresarial: Los gestores pueden promover cambios directivos o estratégicos en las compañías invertidas para favorecer su crecimiento.
Riesgos y advertencias a tener en cuenta
- Iliquidez: Requiere compromisos de permanencia altos; se recomienda analizar si el inversor está preparado para convivir 7-10 años con estos activos.
- Dispersión de resultados: La diferencia entre gestoras puede ser significativa; la elección del equipo gestor es fundamental. Se recomienda valorar experiencia, cohesión y resultados previos.
- Volatilidad menos visible: Al valorarse las participaciones de forma trimestral o semestral, la volatilidad parece menor, pero puede ser elevada (según tendencias de los mercados subyacentes).
- Prima de complejidad e iliquidez: A cambio de retornos superiores se asume mayor complejidad y menor liquidez. No se debe banalizar este hecho.
- Sobreprecio y presión compradora: La entrada masiva de capital está elevando los precios de entrada, lo que podría rebajar las expectativas de rentabilidad futura.
Recomendaciones para invertir con éxito
Todos los expertos coinciden en la importancia de formar parte de fondos bien gestionados, supervisar su historial (track record) y diversificar la exposición a través de entradas progresivas, no concentrando toda la inversión en un único fondo ni año. Integrar el private equity como complemento (no más del 15% de la cartera) se considera adecuado para inversores con cierto apetito de riesgo y horizonte patrimonial a largo plazo.
Además, se augura una “democratización” del acceso al capital privado en los próximos años, permitiendo que los inversores minoristas puedan, de la mano de profesionales, diversificar sus inversiones en estos activos alternativos.
Perspectivas y expectativas de rentabilidad
El consenso entre gestores y expertos es que el private equity puede aportar diversificación y un extra de rentabilidad a las carteras bien estructuradas. Las expectativas, en entorno favorable y con buena selección, se sitúan en torno al 14% neto anual, aunque las características del producto (ilíquido y complejo) obligan a entender perfectamente el funcionamiento antes de invertir, y tener claro a qué se expone el patrimonio familiar o institucional.
La formación financiera es igualmente clave: conocer las primar de complejidad e iliquidez, así como las particularidades del producto, permite tomar mejores decisiones de inversión y aprovechar el potencial de estos activos a largo plazo.
Preguntas frecuentes sobre la inversión en ‘private equity’
¿El ‘private equity’ es adecuado para inversores particulares?
Tradicionalmente, ha estado reservado a inversores institucionales debido a los requerimientos de capital y a la complejidad de análisis. Sin embargo, se prevé que en los próximos años llegue al inversor minorista gracias a la democratización del producto y la aparición de vehículos más accesibles.
¿Qué nivel de liquidez tienen estos fondos?
Muy bajo. La inversión en ‘private equity’ exige permanencia de siete a diez años, aunque se pueden programar flujos de entrada y salida escalonados para adaptar el ritmo de inversión a las necesidades del inversor.
¿Son muy arriesgados los fondos de capital privado?
El nivel de riesgo depende del tipo de compañías seleccionadas, del apalancamiento y de la diligencia del gestor. Puede haber tanto rentabilidades de doble dígito como pérdidas significativas. Por eso, la supervisión del equipo gestor y la diversificación interna del fondo son esenciales.
¿Se puede perder todo el dinero invertido en ‘private equity’?
Es muy poco habitual, pero como en toda inversión existe posibilidad de pérdida parcial o total, especialmente si se concentra en compañías de riesgo, sectores poco sólidos o se elige un gestor sin la experiencia suficiente.
¿Cuánto invertir sobre el total de mi cartera?
La recomendación estándar es no superar el 15% del total de la cartera, considerando el perfil de riesgo y los objetivos a largo plazo del inversor.
¿Qué conocimientos se recomiendan antes de invertir?
Es fundamental conocer el significado de prima de iliquidez, complejidad, diversificación y funcionamiento general del producto. Si no se dispone de estos conocimientos, es recomendable contar con asesoramiento profesional.
Fuente: El Confidencial
Más de 5 años analizando los mercados para encontrar productos financieros con una buena rentabilidad a medio/largo plazo. Con experiencia en fondos de inversión, fondos indexados y planes de pensiones.